Los Ángeles podría pagar hasta $80.000 por jubilación temprana a los trabajadores de la ciudad

El Ayuntamiento de Los Ángeles está listo para ofrecer a miles de empleados de la ciudad pagos en efectivo para jubilarse, como parte de un importante impulso para reducir los costos de la nómina durante una crisis financiera en desarrollo.

Unos 2.850 empleados, o aproximadamente el 8.2% de la fuerza laboral de la ciudad, serían elegibles para jubilaciones de hasta $80.000 si lo hacen el próximo año, dijeron analistas de presupuesto de la ciudad.

El programa resultaría en una disminución importante de la fuerza laboral, la más grande desde la recesión de 2008, lo que provocaría nuevas reducciones en los servicios. Aún así, el alcalde Eric Garcetti elogió la iniciativa, diciendo que reduciría los costos de los empleados y que dependería menos de días de licencia para equilibrar el presupuesto.

“(El plan) Ahorrará dinero y costos. Y tal vez pueda disminuir los permisos”, dijo.

El Comité de Presupuesto y Finanzas del concejo respaldó el proceso el lunes, preparando el escenario para una votación el martes. Si se aprueba, los empleados de la ciudad que son elegibles para jubilarse, y se han enfrentado a la amenaza de solicitar permisos, pueden comenzar a solicitar los pagos de jubilación la próxima semana.

La propuesta se produce cuando el ayuntamiento se enfrenta a una serie de escenarios financieros graves, provocados tanto por una caída en los ingresos fiscales proyectados como por costosos contratos sindicales respaldados por Garcetti y el Concejo en los últimos años.

Los sindicatos de empleados de la ciudad habían presionado agresivamente por el programa de jubilación, describiéndolo como una forma de evitar el plan por licencia de Garcetti. Según los cálculos de la ciudad, los permisos de ausencia habrían provocado un recorte salarial del 10% a casi 16.000 empleados civiles de la ciudad, ahorrando a la ciudad alrededor de $150 millones en el próximo año presupuestario.

La ciudad ahorrará $23.2 millones en el próximo año si la mitad de los trabajadores elegibles acuerdan jubilarse, expuso el Oficial Administrativo de la Ciudad Rich Llewellyn, analista de presupuesto de alto nivel. Si cada trabajador elegible participa en el programa, la ciudad ahorrará $58.7 millones, señaló.

El concejal Bob Blumenfield expresó temores sobre la estrategia y dijo que representa riesgos para las finanzas y las operaciones de la ciudad.

“Si la economía empeora y terminamos teniendo que promover los permisos de igual manera, entonces hemos cometido un error”, manifestó. “Entonces estaríamos peor al pagar estas grandes jubilaciones a tantas personas”.

Llewellyn dijo que espera que la suma promedio de jubilación oscile entre $60.000 y $70.000. Para cada empleado, la cantidad dependerá de su salario y años de servicio.

Jack Humphreville, que forma parte de los Neighborhood Council Budget Advocates, expresó su alarma por la propuesta, diciendo que al público se le ha dado poco tiempo para estudiarla. El programa de jubilación será más costoso que los permisos o despidos y dejará a la ciudad con un gran pago global en aproximadamente un año a partir de ahora, expuso.

Según la propuesta, la ciudad pagaría $10.000 a cada empleado que se retire durante el año fiscal que comienza el miércoles. Al resto de ellos se les pagaría en el año fiscal 2021-22.

“Lo que están haciendo es postergar el problema”, dijo Humphreville.

Si cada empleado elegible participa en el programa, la ciudad gastaría $28.5 millones en este año y otros $128.6 millones el próximo año fiscal, señaló Llewellyn.

Bob Schoonover, presidente del Local 721 de la Unión Internacional de Empleados de Servicio, elogió a los líderes de la ciudad por seguir adelante con la iniciativa.

“Los trabajadores de la ciudad nos están dando todo durante esta pandemia”, dijo. “Este es un paso clave en la dirección correcta porque al final del día, les debemos a estos héroes de primera línea todos los esfuerzos posibles para minimizar el impacto de la crisis presupuestaria actual en ellos y sus familias”.

Durante la última gran crisis presupuestaria de la ciudad, el alcalde y el concejo otorgaron la jubilación anticipada a 2.400 trabajadores civiles de la ciudad. La decisión redujo abruptamente el tamaño de la fuerza laboral. Pero debido a que requería que la ciudad otorgara a los trabajadores sus pensiones antes de lo previsto, los líderes de la ciudad tuvieron que repartir el costo adicional durante 15 años.

Esta vez, los trabajadores de la ciudad no serán elegibles para beneficios de pensión adicionales.

La iniciativa ha sido modelada después de un programa llevado a cabo recientemente en Los Angeles World Airports, que opera el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles. La portavoz de la agencia, Becca Doten, dijo que 331 empleados, o el 9% de los trabajadores del departamento, han solicitado los incentivos de jubilación.

Doten comentó que el programa del aeropuerto fue provocado por una dramática pérdida de ingresos luego del cierre del coronavirus.

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