Incluso con datos incompletos, el condado de Los Ángeles registra 1.703 nuevos casos de coronavirus y 10 muertes relacionadas

Funcionarios de salud del condado de Los Ángeles informaron el domingo de 1.703 nuevos casos de COVID-19 y 10 muertes relacionadas. Sin embargo, advirtieron que la información está incompleta y que los números reales podrían ser más altos.

“Los datos reportados hoy están incompletos debido a retrasos en el sistema de informes de laboratorio electrónico del estado”, dijo el Departamento de Salud Pública del condado en un comunicado de prensa. “Se espera que el número de casos aumente en los próximos días una vez que los datos estén disponibles”.

En general, los funcionarios han identificado 173.995 casos de coronavirus en el condado y reportaron 4.360 muertes desde que comenzó el brote en la primavera.

En todo el condado, según las autoridades, hay 2.033 pacientes hospitalizados actualmente con COVID-19; el 31% de ellos están en cuidados intensivos. Sin embargo, seis hospitales no proporcionaron su información más reciente, dijeron las autoridades.

De las 10 nuevas muertes en el condado de Los Ángeles, tres tenían más de 80 años, tres entre 65 a 79 años, una entre 50 y 64 años y una entre 30 y 49. Los detalles sobre dos de las víctimas no estaban disponibles de inmediato.

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Según las autoridades, alrededor del 92% de las personas que murieron a causa de COVID-19 tenían afecciones de salud subyacentes.

“Enviamos nuestras condolencias y oraciones a nuestros vecinos que han perdido a sus seres queridos por COVID-19, incluidas las familias y colegas que lloran a dos devotos socorristas: un bombero del Departamento de Bomberos de la ciudad de Los Ángeles y un oficial del Departamento de Policía de Los Ángeles”, dijo Bárbara Ferrer, directora de salud, refiriéndose a dos muertes adicionales en los últimos días.

“Las acciones que cada uno de nosotros tomamos afectan la vida de los demás, incluidas las personas de las que dependemos para protegernos: personal de primera respuesta y trabajadores de la salud”, agregó. “Es de nuestro conocimiento que mantenerse físicamente distante de la gente que no está en su hogar, usar cobertores faciales y lavarse las manos con frecuencia funciona para retrasar la propagación de COVID-19 y salvar vidas. Esta pandemia ha sido trágica para muchos y frustrante y agotadora para la mayoría. Sabemos que cuanto antes volvamos a frenar la propagación, antes podremos avanzar en nuestro viaje de recuperación”.

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