LeBron James obtiene algo más que la victoria de Lakers sobre Mavericks
El entrenador de los Lakers, Frank Vogel, le dio crédito a James y Anthony Davis, quienes fueron superados por las estrellas de los Clippers Paul George y Kawhi Leonard en el primer partido
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El rojo de los zapatos de LeBron James hacía juego con el traje de Santa Claus, un par único para un juego especial que ha significado mucho para él en su carrera en la NBA.
Se reclinó en su silla socialmente distante, una pierna cruzada sobre la otra, mientras veía a sus compañeros de equipo de los Lakers extinguir un regreso de los Mavericks de Dallas sin su presencia. Hizo un tiro en los últimos 7 minutos y 19 segundos del juego: una toalla enrollada que envió detrás del banco con un movimiento de muñeca.
El trabajo que había realizado durante los 31 minutos previos de tiempo en la cancha combinado con el armamento ofensivo ampliado de los Lakers le dio la oportunidad de ver a su equipo cerrar el viernes una victoria por 138-115, la primera de esta joven temporada.
De alguna manera, fue una noche perfecta para los Lakers y James. Pudo demostrar por qué es un jugador tan especial en un gran escenario: tirando, encendiendo la ofensiva de los Lakers y alimentando su contraataque frente a una audiencia de televisión nacional. Y pudo hacerlo sin que los Lakers le pidieran que terminara la labor, lo que le ayudó a mantener sus minutos bajos mientras trabaja de regreso a los ritmos de su temporada 18.
El entrenador de los Lakers, Frank Vogel, le dio crédito a James y Anthony Davis, quienes fueron superados por las estrellas de los Clippers Paul George y Kawhi Leonard en el primer partido, por desencadenar la gran noche ofensiva, con James marcando la pauta al atacar agresivamente la defensa de Dallas.
James también cerró el primer partido de la temporada sentado en el banco, esa vez con los Clippers adelantándose. El viernes, las circunstancias fueron más alegres.
Anotó 22 puntos con 10 asistencias y siete rebotes, el único contratiempo real proveniente de un intento de tiro libre de 15 pies que fue de 14 pies y 6 pulgadas, apenas raspando la red.
El juego de adentro hacia afuera de Davis fue haciendo clic, con los Lakers lanzando tiros al aro, después de un bloqueo y, lo más importante, desde el rango de tres puntos, donde conectó tres de cinco en su camino hacia un juego de 28 puntos.
Tuvieron ayuda, mucha, de hecho.
“Tenemos la capacidad de compartir”, dijo James en una videoconferencia posterior al juego.
Game highlights from the Lakers’ 138-115 victory over the Dallas Mavericks on Christmas.
Montrezl Harrell cumplió con las cosas que hace bien: jugar con energía y terminar en la canasta, incluso agregando algunos tiros de salto durante un juego de 22 puntos en tiros de 10 de 13. Lo hizo con estilo también, vistiendo zapatillas con plumas en la primera mitad y dejando con la boca abierta a la banca de Dallas en la segunda, ya que sus minutos siempre fueron de alto impacto.
Y Dennis Schroder, el base armador titular de los Lakers, continuó mostrando el valor de agregar un creador de tiros adicional en la cancha con James y Davis, jugando cuesta abajo hacia el aro mientras acertaba tiros abiertos. Schroder acertó siete de 11 tiros, anotando 18 puntos con seis asistencias.
Los Lakers dominaron el cristal, anotando 35 puntos de segunda oportunidad y manteniendo bajo control a Dallas.
“Tenemos un equipo realmente bueno”, expresó Davis con franqueza.
Vogel dijo que pensó que la derrota ante los Clippers en el primer partido ayudó a su equipo a desempeñarse de manera más aguda el viernes, con los Lakers adoptando el movimiento de la pelota y encontrando al hombre abierto casi desde la punta. Davis señaló que las sesiones de filmación del equipo, que se están convirtiendo en algo popular debido a la capacidad de los Lakers para implementar cambios sin prácticas de maratón, fueron un factor importante.
Y luego hay una continuación de un objetivo simple de hace un año. Nadie va invicto en la NBA, pero puedes ser un equipo que lucha como loco para evitar una racha perdedora.
“Estamos orgullosos de no perder dos partidos seguidos”, dijo Davis.
Obviamente, todavía hay trabajo por hacer: 17 pérdidas de balón habrían dolido mucho más si los Lakers no hubieran disparado tan bien el balón (56%). Y a pesar de que él era el foco de su defensa, Luka Doncic anotó 27 puntos para liderar a los Mavericks.
Pero hay tiempo para resolver esas cosas y solucionar los errores que surgen naturalmente a lo largo del año. Al igual que Vogel todavía está evaluando alineaciones y rotaciones, aunque es muy pronto.
Pero en su primera victoria, los Lakers mostraron su profundidad y su habilidad, superando a un equipo que la temporada pasada tuvo la ofensiva más eficiente en la historia de la NBA.
“Eso es lo que pedía el partido. El juego requería estar bien equilibrado. ...Simplemente estamos moviendo la pelota y entramos en un gran ritmo”, expuso James. “Tenemos la habilidad de cuatro, tal vez cinco muchachos que pueden anotar 20... en una noche cualquiera, siempre y cuando estemos compartiendo el balón, mientras seamos eficientes y defendamos.
“Es algo hermoso de ver”.
Y esa es una buena noticia para James, quien tuvo la mejor vista al ser testigo de los frutos de ese equilibrio desde el banco.
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